Carlota Serra, experta en nutrición: “Congelar el pan no lo conserva igual: modifica tus bacterias y tu digestión”
Congelar el pan es una práctica tan común en los hogares españoles que pocos se detienen a pensar en lo que ocurre dentro de ese alimento cuando pasa por el congelador. Sin embargo, según la farmacéutica y nutricionista Carlota Serra Jorba, ese gesto cotidiano puede tener efectos positivos en la salud intestinal.
El pan, un básico que también puede ser funcional
El pan sigue siendo uno de los alimentos más consumidos en España. De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, cada ciudadano come una media de 31 kilos de pan al año. Aunque algunos tipos de pan están asociados con problemas metabólicos como la diabetes tipo 2, la obesidad o las enfermedades cardiovasculares, la clave, según los expertos, está en elegir un pan de calidad y saber cómo conservarlo.
En este sentido, Carlota Serra explica que congelar el pan puede mejorar sus propiedades nutricionales y hacerlo más beneficioso para el intestino. “Cuando comes el pan tostado que tenías congelado estás alimentando a tus bacterias”, asegura la nutricionista.
Qué ocurre cuando se congela el pan
Cuando el pan se congela, su almidón sufre un proceso llamado retrogradación, que cambia su estructura interna. “El almidón se compacta y se vuelve menos digerible para nuestras enzimas digestivas”, explica Serra.
Esa transformación convierte parte del almidón en almidón resistente, una fibra que no se digiere en el intestino delgado y que llega intacta al colon, donde las bacterias intestinales la utilizan como alimento.

Alimentar las bacterias buenas
Una vez en el intestino grueso, las bacterias fermentan el almidón resistente y producen butirato, un ácido graso de cadena corta con un papel esencial en la salud digestiva. “El butirato sirve como energía para las células del colon, mejora su funcionamiento y ayuda a reducir la inflamación intestinal”, detalla Serra.
Este proceso convierte al pan congelado y tostado en un alimento con efecto prebiótico natural, capaz de favorecer el equilibrio de la microbiota y de proteger la mucosa intestinal.
Cómo potenciar aún más sus beneficios
La nutricionista recomienda combinar este pan con ingredientes saludables para lograr un desayuno o merienda más equilibrada. “Si el pan es integral y lo acompañas de huevo, brotes o aguacate, estás haciendo pleno”, afirma. Estas combinaciones aumentan el aporte de fibra, grasas saludables y proteínas de calidad, esenciales para el bienestar digestivo y general.
Qué es el almidón resistente y dónde encontrarlo
El almidón resistente es una forma de carbohidrato que no se digiere en el intestino delgado, sino que llega al colon donde actúa como alimento para las bacterias beneficiosas. Su fermentación no solo reduce la inflamación intestinal, sino que también mejora la sensibilidad a la insulina y ayuda al control del peso corporal.
Además del pan congelado y tostado, este tipo de almidón se encuentra en alimentos como plátanos verdes, patatas cocidas y enfriadas o arroz frío. Incluirlos regularmente en la dieta contribuye a diversificar la microbiota y favorecer la salud metabólica.
Cómo congelar pan correctamente
Para aprovechar todos los beneficios de este proceso, Serra recomienda cortar el pan en rebanadas antes de congelarlo. De este modo, se puede descongelar solo la cantidad necesaria y se evita que pierda textura o sabor.
Las rebanadas deben envolverse en film transparente o en bolsas herméticas para protegerlas de la humedad y del frío excesivo. Al momento de consumirlo, lo ideal es tostar directamente el pan congelado, ya que el calor potencia aún más la formación del almidón resistente.
Un gesto sencillo con impacto real
En un momento en el que se habla cada vez más de la importancia de cuidar la microbiota intestinal, pequeñas acciones como congelar el pan pueden marcar la diferencia. Este hábito no solo reduce el desperdicio alimentario, sino que mejora la calidad del pan y aporta beneficios reales a la salud digestiva.
Como concluye Carlota Serra, “no se trata de dejar de comer pan, sino de aprender a elegir y conservar mejor lo que comemos”. Una recomendación sencilla, pero con un gran impacto para nuestro bienestar.

Redactor de ActualTV especializado en televisión y redes sociales. Me gusta la comunicación, el mundo audiovisual y el marketing digital. He trabajado como responsable de prensa en diferentes empresas del mundo del entretenimiento y ahora vivo la profesión desde el otro lado.
