Telepizza deja tirados a sus trabajadores que trabajan en franquicias

Uno de sus franquiciados de Telepizza, Regonsa, está generando preocupación debido a presuntos impagos a sus trabajadores. Estos impagos no solo afectan a la estabilidad financiera de los empleados, sino que también exponen a Telepizza a un riesgo de pérdida de reputación que podría ser perjudicial en el largo plazo.

Según informa Merca2, los presuntos impagos a los trabajadores por parte de Regonsa, un franquiciado de Telepizza, están generando tensiones tanto en la empresa como en la sociedad en general. Se mencionan retrasos en el pago de sueldos, posibles subcontrataciones y una falta de respuesta por parte de Telepizza frente a esta problemática.

La situación se agrava con la revelación de que algunos establecimientos de Regonsa, además de operar bajo la marca Telepizza, también gestionan otras cadenas menos relevantes. Esto plantea interrogantes sobre la viabilidad financiera de la empresa y su capacidad para cumplir con sus obligaciones laborales y financieras.

El sindicato CGT de Telepizza en Zaragoza ha expresado su preocupación por la falta de respuesta por parte de Telepizza ante esta situación. Según fuentes sindicales, la compañía parece no estar dispuesta a abordar públicamente el problema, lo que podría empeorar su imagen ante la opinión pública.

La falta de pago de nóminas a los trabajadores, que se extiende durante meses, ha llevado a situaciones de tensión y descontento entre los empleados y los responsables de Regonsa y Telepizza. En Madrid, los trabajadores han protestado por las condiciones laborales precarias y los retrasos en los pagos.

El problema se agrava cuando se constata que los trabajadores afectados dependen completamente de sus salarios para cubrir sus necesidades básicas, como alimentos y alquiler. La falta de respuestas claras y soluciones concretas por parte de las empresas involucradas ha generado malestar y frustración entre los empleados y sus representantes sindicales.

Desde la perspectiva sindical, se insta a las empresas a tomar medidas inmediatas para resolver la situación, incluyendo el pago inmediato de los salarios adeudados y la garantía de condiciones laborales justas y transparentes en el futuro. Además, se pide una mayor transparencia por parte de las empresas respecto a su situación financiera y sus planes para abordar esta crisis.