Los derechos del fútbol, ¿y los de los aficionados?
Cada vez observamos con mayor impotencia, que los derechos de retrasmisión de los eventos de elite deportivos están en manos de las operadoras de cobro de pago por visión.
Las personas, que, por mayor edad, ingresos económicos u otro tipo de factores, no pueden pagar a las operadoras, se quedan sin ver las retransmisiones deportivas.
El problema, no está en los operadores que los dan y cobran por ellos, es parte de su negocio, la clave viene por las cantidades de dinero cada vez más astronómicas que se piden por los derechos de retransmisión por parte de las ligas profesionales, para poder pagar esas indecentes cantidades que sus estrellas reclaman para jugar en determinados clubs.
La televisión a día de hoy, es quien mantiene todo el negocio del deporte profesional, porque por entradas y pago de los aficionados la recaudación económica sería simbólica.
Antes quizás no podías ver todos los partidos, pero el espectador podía ver determinadas competiciones y el resto, el que podía se bajaba al bar a verlas.
Hoy día te sale más barato arrendar un bar para poder ver todos los partidos de fútbol, por ejemplo.
Desde nuestro punto de vista, esto se tiene que acabar, deportes como el fútbol han tocado techo, en cuanto a exigencias de dinero. Quien se hace con los derechos, no puede cobrarlos a precio de oro, porque las operadoras a su vez se lo tienen que cobrar a sus clientes a precios muy elevados, y en resumen cada vez menos gente puede ver deporte de élite a través de la televisión.
Las retransmisiones deportivas son contenidos de interés general, mucho más que la mayoría de los contenidos que dan las televisiones, que no interesan a nadie, son mediocres y sin embargo AL FINAL SON RENTABLES.
El televidente tiene voz y quiere volver a ver el deporte de élite en abierto.