Karlos Arguiñano da una nueva clave de cocina: el orden en el que debes aliñar la ensalada para mejorar el sabor

En el mundo de las expresiones populares, hay un dicho que resuena especialmente cuando se trata de la secuencia de las cosas o su importancia relativa: “El orden de los factores no altera el producto”. Sin embargo, esta afirmación no siempre se aplica en todas las situaciones y contextos. En algunos casos, el orden es crucial y puede tener un impacto significativo en el resultado final. Un ejemplo icónico es el refrán español “tanto monta, monta tanto”, que originalmente se utilizaba para denotar la igualdad de poder entre Isabel y Fernando, los Reyes Católicos.

En el ámbito culinario, el orden de las acciones puede ser determinante para el éxito de una receta. Si bien existe cierto margen para experimentar y jugar con el azar, en la gastronomía, las posibilidades de error pueden aumentar cuando no se respeta un orden específico.

El Método de Karlos Arguiñano en la Cocina

Karlos Arguiñano, el reconocido chef de Beasain, es conocido por su enfoque metódico en la cocina, especialmente en las recetas más sencillas que se ajustan a las necesidades de sus numerosos seguidores. Si bien es flexible en la sustitución de ingredientes, siempre y cuando no afecten al sabor o esencia de la receta, Arguiñano es particularmente estricto cuando se trata del orden correcto en la preparación de platos.

Un ejemplo concreto se presenta al aliñar una ensalada. En verano, las ensaladas son protagonistas en las mesas, y el aliño suele incluir una base de aceite, sal y vinagre, a veces complementado con vinagretas más elaboradas. Para Arguiñano, la ensalada de lechuga, tomate y bonito, una de sus preferidas, se rige por un principio simple pero esencial: prudencia con la sal, mesura con el vinagre y generosidad con el aceite. Además, el orden es fundamental.

El Orden en el Aliño de una Ensalada

La clave radica en la secuencia. Al agregar primero la sal y luego el vinagre, ambos elementos se adhieren a los ingredientes, intensificando sus sabores. El aceite, por su parte, añade un toque final. Sin embargo, si se revierte el orden y se agrega aceite antes, la sal y el vinagre no se adhieren adecuadamente y el resultado puede verse afectado. Además, queda un exceso de aceite en la base de la ensalada.

Un detalle adicional que marca la diferencia es el momento del aderezo. El aliño debe añadirse justo antes de consumir la ensalada para evitar que se altere el sabor, la textura y la consistencia de los ingredientes.

El Orden Correcto Importa

En conclusión, mientras que en algunos casos el orden puede ser secundario, en la cocina y en la preparación de recetas, el orden correcto puede ser un factor determinante para lograr sabores y texturas equilibrados. El ejemplo de Karlos Arguiñano y su enfoque en la ensalada muestra cómo un simple cambio en la secuencia puede influir en el resultado final. En última instancia, como en muchos aspectos de la vida, encontrar el equilibrio adecuado es clave para obtener los mejores resultados en la cocina.