El Gobierno da un paso clave para la adjudación de su nuevo canal de televisión afín

El Gobierno ha dado un paso clave en la evolución de la televisión en España con la aprobación del nuevo Plan Técnico Nacional de la Televisión Digital Terrestre (TDT). Este cambio permitirá reordenar el espectro radioeléctrico y facilitar la incorporación de la tecnología de Ultra Alta Definición (UHD), una mejora que llevaba tiempo en espera debido a retrasos derivados de la pandemia.

Una reestructuración necesaria para la evolución tecnológica

El Consejo de Ministros ha dado luz verde a esta reestructuración con el objetivo de modernizar el sector audiovisual. Según el Ministerio para la Transformación Digital, el plan garantiza la continuidad de todos los canales actuales, tanto a nivel estatal como autonómico y local, además de abrir espacio para una nueva frecuencia.

España se encuentra rezagada en la transición hacia la UHD, una tecnología que ya es un estándar en muchos países europeos. El retraso se debe, en gran parte, a la necesidad de mantener en funcionamiento los canales en definición estándar (SD) durante la pandemia para evitar interrupciones en el servicio. Con esta nueva reestructuración, se da el paso definitivo para la migración total a una calidad superior de emisión.

La apertura del nuevo canal y sus implicaciones profesionales

Uno de los puntos más relevantes del plan es la licitación de una nueva frecuencia dentro del espectro de la TDT. En un principio, el Grupo Prisa se perfilaba como el favorito para hacerse con esta concesión, sin embargo, la falta de consenso interno en la empresa derivó en cambios estratégicos en su cúpula directiva. La disputa por este nuevo canal ha desencadenado una serie de movimientos dentro del sector mediático.

La tensión en Prisa llevó a la salida de Carlos Núñez, expresidente de Prisa Media, y José Miguel Contreras, su director de contenidos. Ambos han pasado a liderar un frente que desafía la dirección de Joseph Oughourlian, máximo accionista del grupo y presidente de Amber Capital. Esta pugna por el control de la empresa ha añadido un componente político a la ecuación.

Intervención del Gobierno en la disputa empresarial

El ministro de Transformación Digital, Óscar López, ha jugado un papel clave en la lucha de poder dentro de Prisa. Según diversas fuentes, López se reunió con Arnaud de Puyfontaine, presidente de Vivendi, que posee un 12% de las acciones del grupo. En la reunión, se habría discutido la posibilidad de que los socios cercanos al Gobierno (como Global Alconaba, Adolfo Utor, Diego Prieto y Escribano) negocien con la empresa francesa para comprar su participación o asegurarse su apoyo en futuras decisiones estratégicas.

Además, el encuentro contó con la presencia de Marc Murtra, presidente de Telefónica, quien, según el medio francés Le Point, habría condicionado un contrato publicitario de 80 millones de euros con Havas al cese del respaldo a Oughourlian. Este movimiento demuestra la implicación de diversos actores en la reconfiguración del mapa mediático español.

El futuro de la TDT y la próxima batalla empresarial

El siguiente episodio en esta contienda empresarial tendrá lugar en la reunión del Consejo de Administración de Prisa, donde se abordará la refinanciación de la deuda del grupo, que asciende a 750 millones de euros. Se espera que esta negociación incluya estrategias para determinar el futuro de la compañía y, potencialmente, la continuidad de Oughourlian al frente de la empresa.

Con la reestructuración de la TDT en marcha y la UHD en el horizonte, el panorama televisivo español experimentará cambios significativos en los próximos meses. La apertura de un nuevo canal, sumada a las disputas empresariales, marcará el rumbo del sector mediático y su equilibrio de poder.